lunes, 16 de junio de 2014

Refugio

Empezaba con el sonido de la lluvia contra el seco suelo y entonces abría los ojos. Fuera hacía frío, un frío húmedo que provocaba que se le metiera por entre los huesos y se aferrara como si no hubiera mañana. Ya había llegado el momento de salir. De cazar. Tenía hambre pero al mismo tiempo miedo de que lo cazaran otro año más. Estaba cansado y solo quería sumirse en la oscuridad.

Mientras contemplaba como el agua caía, derramándose desde las nubes, oyó una risa por el campo de hierba alta mojada. Una risa de felicidad, las pisadas de los charcos del barro. Se escondió mas adentro, protegiéndose con la oscuridad. Algo o alguien entró en su refugio, aún con la risa entrecortando su respiración.
-Uf, qué tormenta más imprevista -se dijo la chica-. Me he quedado empapada.
Olisqueó el aire disimuladamente para captar su aroma, descubriendo con sorpresa que era un plato jugoso para devorar. El sonido de sus tripas muertas de hambre le delataron. La chica se giró, sin miedo en la tez, más bien sorprendida.
-...
Rebuscó en sus bolsillos hasta dar con una pequeña linterna que guardaba para pequeñas emergencias como aquella o un apagón en casa e iluminó el interior del refugio. Corrió a esconderse. La chica ahogó un grito al ver desaparecer una cola reptiliana. A pesar de que el poco miedo que tenía le atenazaba el pecho, avanzó, curiosa.

Pronto sus ojos se miraron. Dejó caer la linterna mientras la criatura la observaba valorando la situación.

Fuera seguía lloviendo. Un rayo se dejó ver y un trueno retumbó en los cielos.

3 comentarios:

Ikana dijo...

¿Y entonces? ¡¿Y entonces?! O_o

Wilhemina dijo...

Frustra más que otra cosa e.e

Trinity dijo...

¡Yepa! ¿Tiene segunda parte o algo? O.o